PABLO VI
UN PAPA VIAJERO E INNOVADOR
Por Elena Luz González Bazán especial para Historia Latitud Periódico y Villa Crespo Digital
28 de julio del 2019
El italiano Giovanni Battista Montini nació en 1897 en el seno de una familia noble y fue pontífice, tomó el nombre de Pablo VI, de 1963 a 1978, fueron años difíciles para la Iglesia.
Durante su pontificado clausuró, en 1965, las labores del Concilio Vaticano II, las mismas fueron iniciadas por Juan XXIII en 1962, y puso en marcha muchas de sus reformas, entre ellas suprimió el índice de libros prohibidos e impulsó una nueva administración eclesiástica más democrática, tal lo planteado durante el concilio.
El Papa Francisco lo definió como "sabio timonel".
La canonización de Pablo VI, por parte del Papa Francisco, es considerado algo fundamental porque para el Papa fue un referente intelectual al que cita muy a menudo.
Resulta de su inspiración la trayectoria de su pontificado y las medidas tomadas, porque lo ayudó y colabora para reforzar el diálogo con las demás religiones, con el mundo moderno e impulsar la idea ecuménica de Pablo VI, quien con sus viajes fue el primer pontífice en visitar los cinco continentes.
El llamado "Papa peregrino" viaja a Tierra Santa en 1964 y se encuentra con el patriarca ortodoxo Atenágoras I, con quien anuló la excomunión mutua impuesta tras el Gran Cisma en 1054.
En 1965, en Nueva York, en la Asamblea General de las Naciones Unidas da un discurso histórico contra la guerra en Vietnam.
Pablo VI fue el primer Papa que visitó América Latina. En 1968 viaja a Colombia, eran otros tiempos, en la Iglesia se encaminaba hacia el pensamiento de la teología por la Liberación y la conformación del Movimiento de Sacerdotes del Tercer Mundo, las luchas revolucionarias y otro momento histórico en nuestro continente.
En 1970, en Filipinas sufre un atentado, cuando un pintor boliviano lo apuñala en Manila.
Los 70 están atravesados por la protesta dentro de la Iglesia, sacerdotes que dejan su lugar, los conservadores que intentan mantener sus espacios de poder, además de la música, la revolución sexual y los cuestionamientos a la familia tradicional.
Las encíclicas de Pablo VI fueron siete: HUMANAE VITAE, en 1968, en ella condena el uso de la píldora anticonceptiva.
En la Encíclica Ecclesiam Suam, de 1964, en el tema La conciencia sostenía:
I. LA CONCIENCIA
Pensamos que es deber de la Iglesia ahora ahondar en la conciencia que ella tiene que tener de sí, en el tesoro de verdad del que es heredera y custodia y en la misión que ella debe ejercitar en el mundo. Aun antes de proponerse el estudio de cualquier cuestión particular, y aun antes de considerar la actitud que haya de adoptar frente al mundo que la rodea, la Iglesia debe en este momento reflexionar sobre sí misma para confirmarse en la ciencia de los planes que Dios tiene sobre ella, para hallar más luz, nueva energía y mejor gozo en el cumplimiento de su propia misión y para determinar los mejores medios que hagan más cercanos, operantes y benéficos sus contactos con la humanidad a la cual ella misma pertenece, aunque se distinga de aquella por caracteres propios e inconfundibles.
Ecclesiam Suam (6 de agosto de 1964)
Breve Biografía
El 26 de septiembre de 1897 nace en Concesio, Lombardía, Italia, Giovanni Battista Enrico Antonio María Montini, era un niño frágil pero inteligente perteneciente a una familia adinerada, a quien más tarde el mundo conocería como el Papa Pablo VI, el Papa peregrino.
Giovanni estudia de pequeño con los jesuitas, en Brescia, que quedaba cerca a su hogar.
Más tarde, en 1916 ingresó al seminario, la situación de su salud hizo que fuera autorizado por sus superiores para que viviera en su hogar.
El 29 de mayo de 1920, tenía 22 años, es ordenado sacerdote y enviado a Roma para que estudie en las Universidades de Roma y la Gregoriana.
Dos años más tarde ingresa a la Academia Pontificia Eclesiástica para prepararse en la Diplomacia sin dejar sus estudios de Derecho canónico en la Universidad Gregoriana.
En 1923, se convierte en adjunto de la Nunciatura de Warsaw, en Polonia, pero el frío invernal y su delicada salud hace que al año siguiente, en 1924 deba regresar a Roma.
En la Ciudad Eterna es asignado a la oficina de la Secretaría de Estado, allí permanecerá durante 30 años. Es además nombrado Capellán de la Federación de los Estudiantes de la Universidad Católica Italiana y es docente en la Academia Pontificia Eclesiástica.
Su papel durante la Segunda Guerra Mundial
El padre, capellán, hombre de la iglesia, Montini lleva adelante como responsable de la atención y el auxilio a los refugiados políticos.
Con 54 años, el 1 de noviembre de 1954 es nombrado Arzobispo de Milano siendo ordenado Obispo el 12 de diciembre del mismo año y el 15 de diciembre de 1958, el hoy San Juan XXIII lo nombra Cardenal.
En Milano fue un apóstol que se acercó a los trabajadores, a los obreros, a los hombres de trabajo, por ello fue llamado el “Arzobispo de los trabajadores”, su apostolado dio el impulso esencial predicando el mensaje social del Evangelio.
Promueve la educación católica y ayuda a la prensa católica.
En 1963, luego de un breve pontificado, muere Juan el bueno, hoy San Juan XXIII. Esto dará paso a la elección de un nuevo Papa y es elegido el Cardenal Montini, el 21 de Junio de ese año.
Toma el nombre de Pablo VI, y sus primeras palabras se referirán a continuar con la labor de su predecesor. Pablo Vi, como Cardenal Montini, había trascendido por su obra.
Su Pontificado
Uno de los conflictos subsistentes era la primacía del Papa y el Colegio Episcopal.
Las fuertes diferencias de criterios sobre el papel de la iglesia y su defensa del “depósito de la fe”.
Entre sus medidas:
El 14 de septiembre de 1965 establece el Sínodo de Obispos y de los Padres Conciliares, hubo temas de discusión que fueron reservados para el Papa.
En cuanto al celibato, el 24 de junio de 1967 trató el tema en una encíclica.
El 24 de julio de 1968 escribió en su último comunicado papal, Humanae Vitae, sobre la regulación de la natalidad.
Estos serán temas discutidos, controvertidos en medio de su pontificado.
El recuerdo de Pablo VI es de un hombre de la iglesia muy inteligente, de una gran espiritualidad, sencillo, reservado, muy amable, de gran cortesía, sincero, fiel a sus preceptos y su condición de hombre de la Iglesia.
Se lo llamó el Papa peregrino porque fue el primero en recorrer los cinco continentes.
Su pensamiento, inteligencia, comprensión de la importancia de la iglesia se ve reflejado en sus mensajes, cartas, discursos, encíclicas y lo que es más importante, su acción sacerdotal.
Así como hoy, el Papa Francisco lleva adelante el diálogo en todas las realidades controvertidas, Pablo VI fomentó el diálogo ecuménico.
Seguramente, un especial recuerdo a su pontificado tiene que ver con haber concluido el Concilio Vaticano II, a esto se suma la rigurosa reforma de la Curia Romana.
Otros de sus escritos fueron:
La encíclica Populorium Progressio de 1967.
En 1971 la carta de carácter social, Octogesima Adveniens, y
la Exhortación apostólica, Evangelii Nuntiandi.
El Papa peregrino, Pablo VI muere el 6 de agosto de 1978, ese día se celebra la Fiesta de la Transfiguración del Señor.
El 11 de mayo de 1993, se da inicio al proceso diocesano de beatificación del Siervo de Dios Pablo VI y el 20 de diciembre del 2012 publicaron el decreto de la Congregación de las causas de los santos, que reconocen sus virtudes heroicas reconocidas por el entonces Papa Benedicto XVI, hoy Sumo Pontífice Emérito.
El Papa Francisco aprobó, en mayo del 2014, su beatificación y la ceremonia se llevó a cabo el 19 de octubre de ese año, en el Vaticano, donde estuvo presente el Papa emérito, Benedicto XVI.
Fuentes: Prensa del Vaticano, ACI prensa, La Nación y fuentes propias.
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